El miércoles el Indec publicó el dato de inflación de abril, el dato del 2,8% resulta sumamente positivo, dado que implicó un desmoronamiento de la inflación desde 3,7% el mes anterior, y que el pass-through del salto del 8,7% al cierre de abril fue despreciable.
El IPC acumula un alza del 11,6% en lo que va del año y del 47,3% interanual, continuando con la marcada tendencia a la baja. Recordemos que el FMI estimó en el acuerdo que la inflación para este año se encontraría entre 18% y 21%.
La expectativa hacia adelante, en caso de sostenerse el tipo de cambio entre el piso y el centro de las bandas y con las dudas con respecto al acuerdo con el FMI y al futuro del esquema cambiario despejadas, es sumamente positiva. La desinflación debería continuar dados los fundamentos respaldados por la mayor estabilidad cambiaria y el sostenimiento de las anclas fiscales y monetarias, así como la eliminación de aranceles a la importación de productos electrónicos y la postergación de incrementos en precios regulados.
Tanto la curva de tasa fija como CER sigue traccionando esta semana de la mano de un buen dato de inflación, aunque ya estaba prácticamente en precios. El miércoles hubo una nueva licitación del Tesoro, en la cual logró un rolleo del 100% de la deuda. La inflación BE para 2025 comprimió a 22,50%. A pesar de que vemos las tasas tanto nominales como reales cayendo seguimos prefiriendo alargar duration con duales sobre boncaps o con bonos CER 2027 en adelante.
Los bonos HD comprimen un 0,73% WTD y 1,08% MTD promedio operando con TIRs entre 10% y 12%, todavía con la curva invertida. Respecto a la acumulación de dólares, el anuncio de la monetización de dólares fue postergado. Asimismo, no hubo novedades respecto a la posibilidad de emisión de deuda denominada en pesos pero a licitarse con dólares (peso linked) como una alternativa a recaudar dólares