Frente a los cuestionamientos acerca de las vías de remonetización de la economía en un contexto de recuperación de la actividad y mejora de expectativas por la salida del cepo, el equipo económico ha salido a dar mayor claridad a algunas cuestiones sobre el nuevo marco monetario que acompaña a la Fase 3 del programa económico, siendo la rotación de un objetivo de Base Monetaria Amplia fija a uno de seguimiento del M2 la característica principal del mismo.
Ante la ausencia de otras vías de expansión monetaria (siendo que el BCRA no financia al Tesoro ni al sector financiero vía pases), surge la pregunta: ¿Cómo se incrementa la cantidad de pesos de la economía para seguir ese objetivo de M2 en caso de que el tipo de cambio no alcance el piso de las bandas?
En paralelo, la economía argentina va profundizando el funcionamiento del bimonetarismo. Esta podría ser una vía adicional de remonetización de la economía.
Los bonos HD terminan corrigiendo a lo largo de toda la curva operando con TIRs superiores al 11% terminando abril con una suba promedio de 7,5% con los bonos más largos avanzando hasta 9%. A pesar de que los fundamentals macroeconómicos tanto fiscales como del sector externo son mejores que créditos con ratings superiores, el historial crediticio de Argentina como las elecciones de medio término de este año son factores que hacen que la convergencia hacia curvas de países como El Salvador o Egipto se postergue.