El BCRA publicó ayer por la tarde el REM de enero, el cual continuó con la baja de expectativas de inflación de relevamientos previos y pronosticó una inflación del 2,3% para enero. En el caso de todo el 2025, se pronostica una inflación del 23,2%. Ahora quedamos a la espera del dato del IPC Nacional que el Indec publicará el próximo jueves.
De todas formas, el foco hoy no está puesto en el dato en concreto (a menos que se publique un dato sumamente negativo con un repunte de la inflación), sino más bien en cuándo logrará la inflación romper la barrera del 2% y acercarse al 1%. Difícilmente se dé dicha situación en la próxima publicación del Indec: dicho acercamiento se daría recién pasado julio, aunque dada la continua baja de expectativas inflacionarias desde hace algunos meses, podría llegar a anticiparse.
A comienzos de la semana, ARCA (ex-AFIP) publicó la recaudación de enero, con la misma incrementándose un 5,6% interanual y un 12,0% contra diciembre. Dado el camino de reducciones de impuestos, resulta indispensable que la recaudación de impuestos ligados al nivel de actividad repunte, para así asegurarse que reducciones de impuestos no impliquen ceder el equilibrio fiscal.
En la semana en la que debutó el crawling al 1%, con un previo recorte de tasas de 300 pbs, la curva de tasa ja no reaccionó, mostrando que ya estaba metido en precios esta baja de tasas e incluso el tramo largo corrigió, evidenciando que quizás el recorte esperado era aún mayor. Tanto la tasa de plazo jo como la de caución cayeron casi 500 pbs y ampliaron el diferencial con respecto a la tasa de política monetaria, lo que muestra la mejora en la liquidez del sistema.
Los bonos HD se desacoplaron de sus pares emergentes esta semana, con los títulos locales cayendo 1,3% en promedio contra una suba de casi 0,5% del EMB, por lo que la corrección parece estar motivada por factores idiosincráticos pese a que los fundamentals no cambiaron. La curva soberana local volvió a invertirse levemente con un diferencial de rendimientos de casi 2% entre los bonos cortos y largos.
A pesar de una semana negativa para el equity global -las medidas arancelarias anunciadas para México, Canadá y China por parte de Estados Unidos y el impacto del “Efecto DeepSeek” en los resultados de las big tech- continuamos con una visión constructiva para el equity argentino para 2025 manteniendo nuestro objetivo del S&P Merval en 3.000 puntos en USD CCL para n de año.
Mantenemos la cartera sin modificaciones de cara a la presentación de resultados del 4T24, con un 35% en el sector Oil & Gas, 35% en bancos, 20% en reguladas y 5% tanto en Real Estate como en Materiales.